dimarts, 8 de març del 2011

El pleno municipal o la misa de los creyentes

El pasado 3 de marzo, como los últimos jueves (¡ya es el 4º!) acudí, junto con algunos miembros de Salvem la Colonia (bueno "miembras", éramos sólo chicas esta vez!), a la sede del distrito de Les Corts. Esta vez se celebraba el pleno municipal mensual, así que mal que les pesara, nos tendrian que escuchar, o ni que sea, oïrnos...Ya tenía yo ganas de ver a estos pájaros en su ambiente... Bueno, aguanté todo el rollo de las presentaciones de los "ilustrísimos" miembros del Consell ..Aaah!!!, con sus trajes caros y sus estudiadísimos ademanes de personas respetables??? Tan pendientes de las formas, ellos... Tuvimos que guardar un minuto de silencio porque había fallecido alguien, la verdad es que no sé quien (ya sabéis mi falta de memoria habitual para los nombres de personas); parece que era muy importante para esta gente, pero, bueno, como no somos tan bordes, lo respetamos. Pero cuando pasó el minuto (por cierto, la voz cantante de todo el discurso no paraba de mirar el reloj, parece que no era tan..."apreciat i respectat i un exemple a seguir per a tots, que ens va ensenyar l'important que és el contacte directe amb les persones, i que tant s'havia desvivit per la gent del barri..." y así todo por el estilo.

Yo, al margen y con respeto a la memoria del muerto, me iba cargando cada vez más como le hubiera pasado a cualquiera en mis circunstancias, con el corazón y el cuerpo cansados por la ingrata vida que estos personajes me han dado. Menos mal que en ese momento las chicas despliegan la pancarta que llevaban escondida y gritan "L'Enkarna es queda... Salvem la Colónia, el Willi es queda, Salvem la Colónia Castells!! Y, claro, enseguida, amablemente (¡Claro, están en plena campaña electoral!) las obligaron a marcharse.. Yo ya me había puesto en pie, y cuando vi que a ellas se las llevaban, mientras Sus Ilustrísisimas se ponían nerviosillos "...els hi pregem disculpin aquesta interrupció.." no me aguanté más y les dije, con un tono de voz que no necesitaba micrófonos que "era culpa de la Sra Regidora que no se había dignado concedernos la intrevista personal que le habíamos solicitado en varias ocasiones, culpa también de Reursa, y de Habitatge y de los Servicios Sociales, que ya estaba cansada de que estuvieran jugando conmigo al ping pong, rebotándome de unos a otros y vivecersa... "Por favor, señora, le ruego espere su turno para hablar, que se tranquilice que tendrá su turno para hablar..." ¿Tranquila, dice?, si se viera en mi situación ya vería lo tranquilos que estarían Udes. Bueno,, me senté de nuevo dispuesta a tener un poco de paciencia.... vale....

Entonces la portavoz de marras nos presenta al nuevo equipo del Districte, y ahí ya no pude seguir callada por más tiempo "¡sí, claro! unos más que van vivir a mi costa, no, no voy a aguantar esto ni un minuto más..." Me levanté, salí de la Sala del Consejo, ante las miradas sorprendidas de los asistentes,(capté alguna mirada de cierta comprensión, tal vez de lástima, no sé), la sonrisa del guardia urbano ya conocido.. y bajé las escaleras ya sin poder contener el llanto de rabia e impotencia.

No sé qué pasó luego, espero que mis vecinos Judit y Joan me lo cuenten, porque ellos también estaban, un poco lejos, pero con más paciencia que yo. A las chicas no les pasó nada más, simplemente las hicieron salir a la calle... Total, me tomé una caña en el bar con ellas y me retiré a mi casa, pensando por el camino "¡Qué bien, a casita, suerte que aún tengo mi rincón de descanso... aprovechemos mientras dure.."

En fin, toda una experiencia! Os aconsejo que echéis un vistazo a un Pleno de Ayuntamiento, si podéis... Es una experiencia "religiosa", ahí una entiende, porque se siente en vivo y en directo, toda la cuchufleta de nuestros políticos, y os aseguro que se os va a encender la sangre. Si os gustan las experiencias de alto impacto emocional, daros el gusto algún día.... y ir a repicar a la misa de los creyentes... esos que se creen con la legitimidad universal y no les apoyan más que cuatro privilegiados.

En fin, lo que quería deciros es que os debo haber llegado  hasta aquí, gracias a la fuerza de vuestra solidaridad y apoyo en estos días tan difíciles para todos nosotros, sin toda vuestra solidaridad esto no hubiera sido posible.

Gracias 1000... y a seguir hasta la próxima, que no sólo nos tengan que oír, que también nos tengan que escuchar y dar la razón.